Son los Detalles

Esteban es un chico con espíritu libre, nunca le ha gustado sentirse atado a nada ni a nadie, hace lo que quiere, cuando quiere, porque quiere, se la pasaba bien con Lorena, pero hay cosas de ella que no soportaba, y es que Lorena lejos de ser posesiva es muy maternal, no es sensible, pero es muy detallista, fechas, horas, lugares... simples detalles que para Esteban no tienen ningún valor, se querían.

Para Esteban esa relación solo lo sacaba de la rutina, le daba un poco de compañía, le solía decir a Lorena: "me das miedo", muy en el fondo sabia que el miedo se lo daba él mismo al no poder creer que pudiera llegar a amar tanto a alguien. Por el miedo se separo de ella.

Para Lorena ese amor duraría toda la vida. Siempre definió la relación con Esteban como: "lo más raro que me ha pasado", cada vez trataba de hacer lo que a él mejor le pareciera, pero igual que a ella esas cosas a él no le gustaban, si, los dos son demasiado extraños no les gusta ser complacientes, y tampoco complacidos. He ahí el detalle.

Todas y cada una de las parejas de Lorena ocupan un sitio importante en su mente, cuando se alejaba de alguien el recuerdo poco a poco (muy muy poco a poco) se hacia chiquitito pero así aunque fuera tan pequeñito ahí se quedaba y de ahí nadie lo movería.

Esteban se quedo mucho tiempo en el mismo lugar: en el cuerpo, la mente y el corazón de Lorena; y es que hay cosas que dejan una marca demasiado grande y notoria. Así se quedo Esteban en Lorena, no se movió y cuando lo hizo seguía ahí una silueta enorme, siempre haciendo sombra a cada persona que trataba de involucrarse con ella.

El hecho de no haber cerrado bien el circulo de su relación dejo en Lorena eterna añoranza, la llenaba de desesperación no saber si volvería a tener a su lado a alguien con quien pudiera ser ella misma como con Esteban, con quien pudiera hacer y decir cosas que nunca se había atrevido a hacer o a decir... estaba atrapada.

Lorena nunca llego a conocer bien a Esteban, sabia que no podía confiar en él, pero cuando él estaba a su lado el mundo desaparecía, Lorena se desarmaba ante Esteban, el solo mirarla provocaba que ella sintiera que su corazón por propia voluntad se abriera paso entre hueso, órgano, musculo y piel para correr a los brazos de Esteban. Con nadie le ha pasado esto. Lo que vivieron juntos fue poco, pero muy intenso, difícil de olvidar, complicado de no extrañar. Son los detalles.

Hoy, después de dos años se encontraron, todo era igual, la conexión, la química, las chispas que sacaban al besarse. Ella se seguía derritiendo escuchando la voz de Esteban, increíblemente le seguía sacando una sonrisa de la nada, el calor de sus manos seguía en la misma temperatura, su piel, sus ojos, su cabello negro negro... todo... todo como ella lo recordaba, los detalles. Ella ni siquiera intento resistirse, sabía que caería a sus pies en cuanto sus ojos se cruzaran con el ser más y sobretodo menos perfecto que ha conocido, pero que sin lugar a dudas era su alma gemela, la parte que le faltaba.

Lorena no sabe con cuantas y ha cuantas chicas Esteban les despierta la misma sensación de no poder separarse de él.

Después de esta tarde nunca se volverán a ver... son los detalles.